BURO 25

AVENIDA EL DORADO

Ubicado en una zona industrial y alejada de la urbe de Bogotá, se encuentra el centro empresarial BURÓ 25 en donde Jotaele Arquitectura se encargó de llevar a este ambiente, ciento por ciento laboral, un “pedacito de casa” con el diseño del lobby y las áreas comunes.

Diseño interior:  ©Jotaele arquitectura Fotografía:©Mónica Barreneche

A través de los siglos se ha comprobado que el ser humano es capaz de adaptarse a su entorno tanto físico como cultural, y que las formas de los espacios que habitamos son la expresión de esta adaptación. No hay un acto más privado que recibir a alguien en la propia casa. Es una expresión de confianza y amabilidad. Con esta misma idea, las arquitectas Jimena Londoño y Laura Escobar quisieron generar este efecto de confort que genera lo doméstico al crear múltiples ambientes dentro del espacio de gran formato que recibe a los y visitantes de este centro empresarial en la ciudad de Bogotá. “Nos quisimos salir del ambiente típico laboral. Lograr de alguna manera que los usuarios de estas áreas se sintieran como en casa” comentan las arquitectas. “Debíamos proponer en un solo espacio diferentes formas de estar y que, al mismo tiempo, estos microambientes se pudieran habitar de forma individual”, añaden.

Es por esta razón que este gran ambiente se puede utilizar en cuatro momentos diferentes. En la esquina norte del costado oriental del lobby, la obra del artista colombiano Christian Abusaid salta a la vista sobre una pared de doble altura enchapada en madera de roble que viste la totalidad del área intervenida. La misma obra sirve de observadora de la mesa de trabajo de mediano formato de la marca antioqueña Perceptual, cuyo tamaño y calidez ofrece un lugar ideal para trabajar con portátiles y tabletas. Más adelante, en este mismo espacio enmarcado por un tapete ovalado azul petróleo de Tejidos LAV, una poltrona de la misma marca antioqueña y una mesa auxiliar-butaco de Folies brindan un spot individual cuyo mobiliario envuelve al usuario con su diseño.

Del otro lado de una columna de concreto a la vista, se encuentran dos salas de espera contiguas que ofrecen posibilidades de reuniones medianas o grandes, según la necesidad. Gracias a la tipología del mobiliario, estos dos espacios, contenidos en uno, son móviles y adaptables. Con la elección de marcas nacionales como 902, Folies, Tugó, 5am y Vida Útil, entre otras, Jotaele se aseguró que estos elementos —relacionados con lo doméstico como son poltronas, sillas, mesas auxiliares, lámparas de piso y sofás— se amoldaran al uso contract sin perder el efecto de confort. “Al momento de cambiar la luz fría e industrial por una iluminación cálida e indirecta, uno se siente acogido y cómodo, esto mismo se aplica con las texturas generadas por la madera y la tapicería” agregan.

El uso selectivo del color fue una herramienta clave para generar este efecto de bienestar y, asimismo, para categorizar los espacios. Gamas que van desde el vinotinto, pasando por el palo de rosa, el taupé, el gris claro y oscuro, hasta llegar al azul, marcaron el lobby y los recibidores de las salas de juntas, mientras que el uso osado del verde protagonizó de forma geométrica el auditorio.